¡Le sonrío a la vida de nuevo! Tuve una revelación que me hizo entender la raíz de todos mis problemas: YO NO ESTOY MAL POR ÉL, ESTOY MAL POR MI. Era simple. Era muy sencillo. Oh queridos! este es el comienzo del fin de mi sufrimiento.
Epílogo
Hace 15 años.
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