lunes, 10 de noviembre de 2008

Desde un punto de vista metafísico, se ha definido el dolor como "el esfuerzo necesario para aferrarse a un pensamiento negativo". Esta idea se basa en la creencia de que los seres humanos estamos dotados de una serie cualidades innatas, que son las cualidades naturales de la propia vida: armonía, sabiduría, fuerza, amor, etc. Serían todas la cualidades consideradas como "positivas". Según este punto de vista, estas cualidades se manifiestan en la persona de forma natural y espontánea sin necesidad de ningún esfuerzo o acción concreta. Cuando alguien reprime esta manifestación natural negándola en su pensamiento se produce en él o ella lo que percibimos como dolor.



Wikipedia tiene una definición para cada sentimiento.
Sería genial que además tuviese una guía con posibles soluciones para la vida.



Hoy no siento BRONCA,
siento otra cosa,
decepción quizas,
todavía no sé.

Sólo sé que no quiero comer caramelos, y eso si me preocupa.


Los hombres, definitivamente, no son todos iguales. Decirlo sería una estupidez bastante importante digna de solteronas desesperanzadas o divorciadas. PERO - siempre hay un pero - cada día noto más que, a pesar de ser todos diferentes, quieren ser todos iguales.
Es increíble. A las mujeres nos puedes criticar millones de cosas, pero los hombres no aprecian ni su propia individualidad.
El día en que los hombres aprendan a gustarse asi como son y no le tengan miedo al que dirán... ESE DÍA, las mujeres vamos a dejar de quejarnos de nuestra panza.


¿Algo más tonto? Que los hombres nos tengan miedo. Y no lo digo yo, lo dicen ellos. Nos etiquetan de perras, traidoras, histéricas y nos critican el hecho de que no tenemos códigos entre nosotras. Asi como ningún hombre es igual a otro, ninguna mujer es igual a la que tiene al lado. Y creo fehacientemente que nunca van a poer darse cuenta. Asi que, para darles el gusto, seamos todas perras, traidoras, histéricas y acostémonos con el novio de nuestra amiga.. se ve que es lo que buscan.




BRONCA es lo que que tengo adentro.







Historia del que padecía los dos males .

En la calle Caracas vivía un hombre que amaba a una rubia.
Pero ella lo despreciaba enteramente.
Unas cuadras mas abajo dos morochas se morían por el hombre y se le ofrecían ante su puerta. El las rechazaba honestamente.
El amor depara dos máximas adversidades de opuesto signo: amar a quien no nos ama y se amados por quien no podemos amar.
El hombre de la calle Caracas padeció ambas desgracias al mismo tiempo y murió una mañana ante el llanto de las morochas y la indiferencia de la rubia.



Crónicas del Ángel Gris, Dolina

sábado, 1 de noviembre de 2008

La calle del bien y del mal

Como bien lo sabemos, la cuadra del Angel Gris esta en la calle Artigas entre Bogota y Bacacay. Sucede alli algo muy particular: en una de las veredas no es posible ser bueno. En la otra es imposible ser malo.

Una noche pase con una muchacha rubia por la vereda oeste. La arrinconé en un umbral oscuro, la bese con pasion y logre poseerla alli mismo.
Despues cruzamos la calle. Y mientras caminabamos por la vereda oriental, le pedi que me olvidara y la abandone para siempre.
En la cuadra del Angel Gris hay dos veredas. En una no es posible ser bueno, en la otra no se puede ser malo. Aun no tengo decidido cuál es cual.




Crónicas del Ángel Gris - Dolina

 
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