Si hay algo que no entiendo, es cómo Aurora (más conocida como la Bella Durmiente) pudo conformarse con sólo tres virtudes. Mi teoría es que había escasez de hadas, porque no puede ser que las muy ratas sólo le hayan dado el don de la belleza, el de la música y el de ¿la bondad? (no me acuerdo). Bue, además tuvo que soportar dormir 100 años por culpa del hada resentida.

Cuando nací hicieron una convención de hadas, duendes y todo tipo de seres mágicos que se encargaron de hacer de mi una ensalada de virtudes y defectos, a veces inexplicable y sin sentido. Tengo una sobredosis de buenaondismo tremenda, tengo ojos gigantes y me encantan, soy copada, soy bastante positiva, me gusta bailar, me gusta el sexo, me rio de los chistes malos que es algo que levanta el autoestima de los comediantes frustrados, puedo ser muy tierna y me gusta escuchar, y me gusta el futbol... el problema es que se les ocurrió también llenarme de porquerías, como mis estados de nosequemepasaismo, mis obsesiones que van desde el orden extremo hasta las locas ganas de casarme, la falta de voluntad, el insomnio, las ganas de llorar, los celos insoportables y agobiantes, y las incansables ganas de hablar (SIEMPRE, todo el tiempo y como no me alcanza la gente, también hablo sola), oh! también me automedico.

Me queda otra, pero que es buena o mala depende de quién la mire... y es que tengo el si fácil.

En fin, soy un quilombo. Pero un quilombo con buena onda. Un quilombo querible.