sábado, 19 de septiembre de 2009

Hola, vengo a hacer catarsis.

Algo que tengo de bueno es que soy feliz la mayoría del tiempo. Aunque pasen cosas malas y esté triste, sigo siendo feliz. Es una felicidad natural, me acompaña adonde vaya.
Hoy pensé que esa felicidad iba a esconderse en el bolsillo de mi pantalón e iba a abandonarme, pero NO. Estaba bien, estaba energética y torpe como siempre. Sonreia, decia boludeces. TODO PERFECTO.
¿Qué pasó? La felicidad se avivó. Al regreso, caminé media cuadra y se me hizo un nudo... caminé una cuadra y se me empañaron los ojitos (aww, qué tierna)... caminé una cuadra y media y ya la situación había empeorado... cuando llegué a la puerta de casa, ¡DIOS!, ya no había vuelta atrás: nuevamente, y como por arte de magia, Bubulina estaba llorando.
¿Qué decidió Bubulina? Arriesgué mi vida, crucé Cabildo y me fui a caminar por Olleros a ver las hermosas casas y soñar un rato mientras despejaba mi mente y secaba mis ojos con la manga de mi buzo.
La felicidad no regresó, pero la tranquilidad y la calma volvieron a mi, por lo que decidí finalmente ir a mi hogar. Una vez aqui, me cambié, descargué mi mochila y pensé 'voy a poner música y voy a tirarme un rato a descansar y seguir soñando'. Resulta que puse la biblioteca multimedia del Reproductor de Windows, tipo de reproducción aleatorio, me acosté muy tranquilamente en mi cama y como si nada, el muy puto eligió poner 'Come Away With Me'... ESAS COSAS NO SE HACEN. Pero no! ¡no lloré!, simplemente corrí a apretar el botón de siguiente que tiene mi teclado. Me di vuelta para regresar a la comodidad de mi cama y no pasó ni medio segundo y el jodido Reproductor me pone 'All four seasons', por lo cual dije (grité) QUE SE MATE y decidí aguantarme lo que la pc eligiera.

Y ahora acá estoy, escuchando Kevin Johansen, escribiendo en el blog, atándome las manos y manteniéndome alejada del celular para evitar cualquier tipo de recaida y pensando... pensando como nunca. Pensando en que quizás debería haber sido más grande, en que puedo seguir intentando y en que no tiene porqué ser definitivo, en que no le importa tanto como me importa a mi... pero también pienso en que no tuve nada que ver, en que ya fue todo y no está en mis manos solucionar nada, en que para él quizás no fue dificil... pero no me creo nada, no me convenzo de nada, porque simplemente NO SÉ NADA y ni siquiera logro entender nada.
No puedo entender qué es tan complicado, qué es tan inmoral, qué es lo que hay que pensar tanto y menos que menos logro entender porqué no pudo dejarse llevar como lo hice yo.
Pero lo que sí entiendo es que es injusto pensar en que todos tienen que actuar o pensar como yo. Y más injusto es no respetar las inseguridades y dudas de otra persona, cuando yo misma pasé por esas cosas.

Diez años para mi no significan absolutamente nada...
pero yo soy yo,
él es él,
yo tengo mis mambos,
él tiene los suyos,
yo soy emocional,
él es racional,
yo vuelo
y él levita(?)
y es algo que no depende de ninguno...

Y no estoy llorando, pero me estoy odiando porque siento que estoy resignándome.

Lo seguiré viendo, lo seguiré queriendo y me seguirá gustando. Pondré mi mejor sonrisa de publicidad y aguantaré las ganas de darle un beso hasta que me acostumbre a la situación... y cuando eso suceda, lo seguiré viendo y lo seguiré queriendo y va a ser todo mucho más fácil.


PACIENCIA
que esta vida es única e irrepetible
y tengo que vivirla lo mejor posible.



(y debo decir que no hay nada más espantoso que las papas de McDonald's frías)






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